¿Son los libertarios un movimiento conservador?
En Argentina, y también algunos países de la región, estamos viendo un auge del liberalismo. Las ideas liberales aparecen en las primeras planas y hasta llegan a instalar los temas de la agenda.
Sin embargo, no son pocos los que dicen que, detrás de este movimiento que, en particular, se denomina “libertario”, se esconden en realidad un conjunto de ideas conservadoras.
¿Será esto realmente así?
Alejémonos de la Argentina por un instante. Es que, como ustedes entenderán, el movimiento libertario no es exclusivamente autóctono. De hecho, se estima que el adjetivo libertario nació en los Estados Unidos allá por mediados del Siglo XX, como una forma de diferenciarse de los “liberals”, que en realidad eran los simpatizantes del partido demócrata y que se habían apropiado del adjetivo liberal.
Los libertarios, entonces, aparecen como un tercer movimiento en Estados Unidos, equidistante tanto de la izquierda demócrata como de la derecha del partido republicano. Un tercer movimiento, que no solo lucharía por las libertades económicas, sacando al estado de tu bolsillo, sino también por las libertades individuales más ampliamente consideradas, quitando al estado de tu habitación.
Liberales, liberales, digamos.
Ahora que ya tenemos medianamente bien definidos a los libertarios, nos queda preguntarnos si realmente son liberales o si, en realidad, son un movimiento más conservador o de derecha.
Y para eso vamos a utilizar al sitio I Side With, que realiza encuestas masivas a través de internet y que ofrece los resultados segmentados por las simpatías políticas de los votantes.
LIBERALES EN LO ECONÓMICO
Para empezar, veamos qué opinan en Estados Unidos sobre el gasto del gobierno. Si nos metemos en ISide With veremos que frente a la pregunta de si el gobierno debe realizar recortes en el gasto público para reducir la deuda pública, el 63% de los encuestados cree que sí, mientras que el 37% restante cree que no. El universo de votantes es de unas impactantes 13 millones de personas.
Ahora bien, qué pasa si segmentamos dicha votación por los votantes que se autodenominan “libertarios”. En dicho caso el porcentaje que cree que el gasto debe recortarse sube al 85%. Algo similar se ve en los votantes del partido republicano, quienes en un 86% creen que debe reducirse el gasto público. Los demócratas, los “liberals”, en cambio, consideran en un 58% que el gasto del gobierno no debe recibir recortes.
Considerando este tema, nada fuera de lo esperable. Los libertarios quieren un estado más chico, y eso se consigue bajando el gasto público. Además, en esto hay coincidencias entre libertarios y conservadores.
En otras propuestas económicas, como si el gobierno debiera subir el salario mínimo, o si el gobierno debiera pagar por las matrículas de los estudiantes de carreras de cuatro años, los libertarios también consideran, en un 79% y en un 84% que esto no debe hacerlo el gobierno. Otra vez, se ve algo previsible: los libertarios, como cualquier otro defensor de una economía de mercado, están en contra del intervencionismo y de que el gobierno fije precios o regale subsidios por doquier.
O sea que, en temas económicos, los libertarios abogan por un estado reducido y no intervencionista. Nada nuevo bajo el sol.
LIBERALES EN LO SOCIAL
Pasemos ahora a los temas “sociales”, a los temas “civiles”, donde se suele acusar al liberalismo de ser, en realidad, una fachada que oculta ideas más de derecha, conservadoras del statu quo.
Si esto es así, seguramente los libertarios en realidad estén en contra de la legalización de las drogas, del matrimonio y la adopción homosexual, y de la legalización del aborto. No obstante, tales presunciones no se ven confirmadas por las encuestas que acabamos de mencionar.
(O podrían estar a favor de que vuelva el servicio militar obligatorio. Bueno, no, ni Aldo Rico está a favor de ese disparate).
Volviendo, frente a la consulta de si se está a favor de despenalizar el uso de drogas, el 57% de los estadounidenses manifiesta que sí está a favor, mientras que el 43% rechaza la idea.
Si vemos qué piensan los libertarios, un enorme 88% está a favor de despenalizar, y solo el 12% se opone. Esto muestra un contraste muy grande con el partido republicano, donde la mayoría (un 68%) se opone a la despenalización.
Pasemos ahora a lo que en Argentina se conoce como matrimonio igualitario y a la adopción homoparental. En estos temas, los libertarios se manifiestan abrumadoramente a favor de ambas. El 91% de los libertarios están a favor de que dos personas del mismo sexo contraigan matrimonio civil, mientras que el 89% cree que las personas homosexuales deben tener los mismos derechos de adopción que las parejas heterosexuales.
Esto contrasta fuertemente con el partido republicano, ya que sus votantes solo aprueban en un 55% la adopción homoparental, y en un pequeño 34% el matrimonio entre parejas del mismo sexo.
Cerremos esta sección con el tema más espinoso de todos, la legalización del aborto. Es cierto que en Argentina existen muchos liberales que se manifiestan en contra del derecho de la mujer a interrumpir el embarazo. Desde mi punto de vista, los argumentos expresados por estos referentes son totalmente atendibles, aunque también considero que los del otro lado son válidos y me inclino, como argumenté en este debate, por la posición a favor de la legalización.
Ahora bien: ¿es la mía una posición minoritaria o mayoritaria dentro de los llamados liberales o libertarios? Si volvemos a I side With vemos que mientras en Estados Unidos el 62% de la población encuestada se manifiesta a favor de la despenalización, los libertarios apoyan la misma en un 71%, 9 puntos porcentuales por encima del promedio. Los republicanos, en cambio, son mayoritariamente “pro vida”, ya que el 68% se manifiesta en contra de despenalizar el aborto.
MOCIÓN RECHAZADA
Habiendo visto estos datos, y por supuesto admitiendo los límites que esta metodología de encuestas puede tener, aparece claramente una cosa: que los libertarios –en su inmensa mayoría- no tienen posiciones conservadoras, sino que están a favor de la libertad tanto en temas económicos como en los llamados “temas sociales”.
Por lo tanto, basándonos en estas encuestas, no queda otra que rechazar la acusación de que los libertarios son solamente conservadores disfrazados.
Por último, queda una pregunta por hacer: si en realidad muchos de los que se autodenominan libertarios tienen ideas más afines a las del Partido Republicano en los Estados Unidos, ¿por qué insisten en llamarse libertarios? ¿No sería más adecuado que se autodenominaran conservadores o liberales *solamente en lo económico* o simpatizantes de la derecha?